Osteoartrosis Felina

La  osteoartrosis felina (OA) aparece en el paciente en promedio sobre los 12 años de edad.  Llega a consulta casi siempre por otros motivos, al hablar con el propietario es cuando aparecen los comentarios de esta patología debido que el gato no manifiesta abiertamente el dolor y el propietario piensa que esos cambios son normales por la edad. Los signos clínicos son al principio escasos, luego la caminata se hace más rígida, los saltos disminuyen o ya no se realizan, tienden a tener posturas más de quietud.

Normalmente la OA es de causa desconocida, hay razas que tienen predisposición como la displasia en el main coon, la luxación de rotula del abisinio y la osteocondrosis en el  fold    escoses, si llegan a la vida geriátrica las articulaciones más afectadas son cadera rodilla, tarso y codos; a veces en una y otras en todas las articulaciones

Siendo la OA  la degeneración del cartílago, ésta alteración genera  inflamación de la  capsula articular, produciendo dolor por la disminución del colágeno que le da forma y resistencia y los proteoglicanos que proporcionan elasticidad.  Esta degeneración ósea (hipertofia del hueso periarticular) provoca cambios de comportamiento y disminución de la calidad de vida del felino. Entre las causas de la degeneración están la edad y causas hereditarias como displasia de cadera.

Entre los signos que se consideran indicativos de la osteoartritis están:

• Defecar fuera de bandeja, pero cerca de ella, porque ya no puede levantar sus patitas para entrar a la cajita.
• Cambia los sitios altos en los que dormía y ahora duerme en el piso.
• No se acicala, solo lo hace en algunas partes, pues el acicalamiento requiere de flexibilidad para llegar a todas las áreas
• Disminuye el juego, sobre todo el de persecución, o el tumbarse de espalda para jugar con la caña de pescar.
• No salta muebles ni áreas altas
• Las uñas se engrosan mucho y tienden a crecer y se pueden enclavar sobre el cojín plantar.
• Esconderse es el signo más notable de los gatos

Lo más indicativo es que el gato no hace lo que antes hacía

El diagnóstico es a veces difícil porque las articulaciones son de tamaño reducido, recordemos que la manifestación del dolor en el gato no es muy evidente.

El principal movimiento que se altera es la caminata, difícil de evaluar en el consultorio, entonces es de mucha utilidad realizar videos caseros del gato caminando o intentando saltar o acomodándose para dormir. Normalmente tienen marcha rígida, claudican y llegan a mostrar algún tipo de parálisis que es muy raro de ver.

El Médico Veterinario hará un examen físico, explorando los movimientos, la simetría, si hay dolor o sonidos anormales y si hay atrofia muscular. El interrogatorio al propietario permite evidenciar los cambios que aparecen y su tiempo de evolución. Se recomienda al propietario que sea más observador y note que cosas no está haciendo su gato que pueden pasar inadvertidas.

El diagnostico se confirma con placa de rayos X, exámenes de sangre complementarios perfiles hepáticos y renales para determinar otros diagnósticos diferenciales como: el trombo embolismo aórtico, que es más común con presentación de dolor en el musculo del miembro. Alteraciones endocrinas como hiperparatiroidismo con alteración del calcio en huesos. El calicivirus es un formador de artritis al contagiarse el gato viejo por gatos jóvenes, que entran a la casa.

 El tratamiento es paliativo por ser una patología incurable va orientado a mejorar la calidad de vida, movimientos y retomar los rituales que tenía. La reducción de peso, es de carácter obligatorio en gatos obesos. Las opciones de tratamiento con múltiples analgésicos, fisioterapia, nutracéuticos con glucosamina. Cuando la enfermedad avanza hay más degeneración articular, protectores como glucosaminoglicanos mantienen la elasticidad del cartílago, ellos reducen la inflamación y reducen el dolor. La cirugía se recomienda en lesiones más graves con ruptura de ligamentos.

Es aquí donde la medicina integrativa o complementaria que se practica en Dras. Glenda y Clarena Polo Eraso, ofrece su mayor campo de acción, al devolverle al paciente calidad de vida y a su propietario mayor tiempo para disfrutar con la mascota. Dentro de estas terapias están la acupuntura, homeopatía, el uso de cannabis medicinal en los casos de dolores crónicos.  También se recomienda hacer un ambiente amigable para la mascota, si hace fuera de bandeja poner más bandejas, hacer más bajitas las  paredes de la bandeja, tener varios bebederos en la casa, para evitar amplios desplazamientos en para la comida o el agua, hacer una rampa o escalones para que suba a ciertos lugares, tener lugares acolchados para dormir, si ya no se acicalan cepillarlos, cortar las uñas, es decir ayudarle a mejorar la calidad de vida.

Fuente: www.drasglendayclarenapolo.com